viernes, 2 de junio de 2006

Un embajador goloso

Cuentan que, un embajador británico frente a Estados Unidos, tomó posesión de su cargo en Washintong a mediados de diciembre, y, recién llegado, un periodista norteamericano le preguntó:

¿Que regalo le gustaría por Navidad, Embajador?


El contestó ni corto ni perezoso:

Bueno, una cajita de bombones americanos estaría muy bien

Puedo imaginarme la cara que se le puso al embajador novato cuando, el día de Navidad pudo oir a través de la radio:

Hemos preguntado a varios embajadores qué preferirían como regalo de Navidad. La respuesta del embajador alemán fue: "Una generación de paz para todo el mundo". La del embajador francés "Amor y fraternidad entre las naciones". El envíado del Reino Unido contestó: "Bueno, una cajita de bombones americanos estaría muy bién"

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