San Brandano (o San Borondón) fue un irlandés que vivió entre el 484 y el 578, predicó y fundó monasterios en Bretaña y en el País de Gales y, según un manuscrito cuya copia más antigua se remonta al siglo X (Navigatio Sancti Brandani), empezó un viaje desde Shanakeel, acompañado de 14 monjes, que lo tuvo vagando por ahí 7 años, hasta encontrar con una isla repleta de monjes perfectos, anacoretas y santos.
Esta idea se tomó muy en serio en los siglos XV y XVI, y uno de los viajeros que buscó la insula de San Brandano fue el flamenco Eustache de la Fosse, quien, aunque no la encontró, recogió por escrito una tradición hispano-portuguesa: la isla solo aparecería cuando toda la península fuera reconquistada a los sarracenos.
La leyenda situa la misteriosa isla en el archipielado canario, y los habitantes de El Hierro y La Palma aseguraron en los siglos XVI y XVII que la habían visto, llegando a organizarse expediciones para encontrarla por las propias autoridades del archipiélago. En 1526 salieron de Gran Canaria Fernando Troya y Fernando Álvarez, que no tuvieron éxito. En 1864 la buscó Edward Harvey y regresó con fotografías de la isla. Para ampliar información:
No hay comentarios:
Publicar un comentario